En Manhattan
Dominicana demanda hospital Presbiteriano por mala práctica
Según los familiares, a la menor le pusieron un catéter que le provocó un ataque cardíaco y convulsiones cerebralesNUEVA YORK._ La dominicana Arelis Ravelo ha interpuesto una demanda millonaria contra el hospital Presbiteriano del Alto Manhattan, después que técnicos del centro le implantaran mal un catéter a su hija de 18 meses que sufre de cáncer y casi muere de un ataque cardíaco y convulsiones cerebrales.
El documento de la corte dice que el catéter bombeaba líquidos tóxicos de quimioterapia directamente en el pecho de la menor de nombre Allison, por lo que sufrió un paro cardíaco debido al error médico.
Un cirujano que le hizo a la niña un agujero en el pecho le colocó el aparato, pero poco después, la niña comenzó a bombear el líquido con tanta fuerza que llegaba hasta un pie de altura.
La madre comenzó a gritar desesperada, mientras la niña convulsionaba por un arresto cardíaco a consecuencia de la mala práctica. También sufrió ataques cerebrales.
El catéter le fue colocado después que los médicos le extirparon un tumor maligno en noviembre del 2008 y tuvo que ser sometida a la quimioterapia a través del catéter.
El abogado de la familia, Steven Esptein, dijo que a pesar de la dificultad provocada a la menor por el catéter mal colocado en el hospital volvieron a suministrarle medicamentos para la quimioterapia.
El jurista dijo que en vez de enviar los medicamentos a las venas, el catéter canalizaba los medicamentos en la cavidad torácica de la niña, por lo que también estuvo a punto de ahogarse.
La demanda es por varios millones, pero la madre ni el abogado especificaron el monto.
El documento de la corte dice que el catéter bombeaba líquidos tóxicos de quimioterapia directamente en el pecho de la menor de nombre Allison, por lo que sufrió un paro cardíaco debido al error médico.
Un cirujano que le hizo a la niña un agujero en el pecho le colocó el aparato, pero poco después, la niña comenzó a bombear el líquido con tanta fuerza que llegaba hasta un pie de altura.
La madre comenzó a gritar desesperada, mientras la niña convulsionaba por un arresto cardíaco a consecuencia de la mala práctica. También sufrió ataques cerebrales.
El catéter le fue colocado después que los médicos le extirparon un tumor maligno en noviembre del 2008 y tuvo que ser sometida a la quimioterapia a través del catéter.
El abogado de la familia, Steven Esptein, dijo que a pesar de la dificultad provocada a la menor por el catéter mal colocado en el hospital volvieron a suministrarle medicamentos para la quimioterapia.
El jurista dijo que en vez de enviar los medicamentos a las venas, el catéter canalizaba los medicamentos en la cavidad torácica de la niña, por lo que también estuvo a punto de ahogarse.
La demanda es por varios millones, pero la madre ni el abogado especificaron el monto.
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